DIEZ CLAVES PARA UN DUELO SALUDABLE
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Pensar en el duelo no es tarea sencilla. Se trata de un tema delicado, muy subjetivo y que muchas personas dejan en lo superficial, sin penetrar en las verdaderas emociones que recorren su interior.
Así, podemos indicar que estos son algunos de los elementos que dificultan el duelo:
- Esperar, simplemente, que pase el tiempo, creyendo que al pasar justo un año todo volverá a la normalidad.
- Intentar mostrar fortaleza durante mucho tiempo, intentando evitar así tristeza en otras personas del entorno.
- Buscar de manera inmediata la vuelta a la rutina, demorando así un duelo que más tarde saldrá por uno u otro lado.
- Apoyarnos en una sola persona o dos a lo sumo, provocando el cansancio y saturación de las mismas y su progresiva retirada.
- Temer que el paso del tiempo nos llevará al olvido del ser querido, algo que no pasará salvo demencia que lo impida.
- Sentir culpa por lo que pudimos haber hecho o por lo que hicimos.
- Descartar el volver a disfrutar de la vida en ausencia del ser querido.
- Pretender mantener el mismo orden previo a la pérdida, desde el punto de vista del entorno decorativo.
- Limitarse a la misma rutina previa, sin incluir estímulos novedosos.
- Sufrir por desconocer la realidad del ser querido perdido, ya sea desde lo religioso, espiritual o eclecticismo más puro.
